Presidente de la República de Colombia, Virgilio Barco Vargas y Presidente de la República Federativa del Brasil; José Sarney

Declaración conjunta Colombo-Brasileña

1. Los dos mandatarios reiteraron la plena adhesión de sus gobiernos a los propósitos y principios consagrados en las cartas de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos, particularmente a la igualdad soberana de los Estados el respeto a la independencia política y la integridad territorial de las naciones, la autodeterminación de los pueblos, la no intervención en los asuntos de otros Estados, la renuncia a la amenaza o al uso de la fuerza, la solución pacífica de las controversias, y el fiel cumplimiento de las obligaciones emanadas de los tratados y de otras fuentes del derecho internacional. Manifestaron su convicción de que los objetivos supremos de la paz, justicia, cooperación y desarrollo requieren el continuo apoyo y revitalización de aquellos foros, tarea para la cual acordaron estrechar aún más las acciones entre sus gobiernos.

2. Reiteraron su firme compromiso de emplear la energía nuclear para fines exclusivamente pacíficos y en este sentido, reafirmaron la necesidad de garantizar el libre acceso de todos los, países a la tecnología. equipo y material nuclear.

3.Como jefes de Estado de dos países que han renunciado explícitamente al empleo de la energía nuclear para fines bélicos, resaltaron la urgencia de adopta medidas concretas, equitativas y no discriminatoria dirigidas a detener y revertir la carrera armamentista nuclear y a eliminar todas las armas de destrucción masiva

4.Expresaron su satisfacción por la "suscripción de primer acuerdo real de desarme de la era nuclear y reafirmaron la necesidad de que las negociaciones entre los Estados Unidos de Norteamérica y la Unión de Republicas Socialistas Soviéticas estén vinculadas a los esfuerzos en los foros multilaterales de desarme tiene siempre presente el legítimo interés de todos los Estados de participar en el proceso de la toma de decisiones sobre esta materia, que afecta a toda la. Humanidad

5. Ratificaron su repudio a todas las formas de discriminación racial y renovaron su condena enfática a la persistencia, en África del Sur, del régimen de Apartheid que, por sus sistemáticas e inaceptables violaciones a los derechos humanos, repugna la conciencia ética de los pueblos y representa amenaza a la paz y a la seguridad internacionales. Subrayaron, en este contexto, la necesidad ineludible de que se intensifiquen los esfuerzos de la comunidad internacional dirigidos a poner fin a la ocupación ilegal de Namibia y asegurar el derecho de su pueblo a la independencia, de conformidad con las resoluciones emanadas de las Naciones Unidas.

6.Los dos presidentes examinaron la situación en el Medio Oriente y reiteraron la necesidad de que se alcance una solución amplia, justa y duradera para el conflicto árabe-israelí, que permita a todos los Estados y pueblos de la región vivir en paz dentro de fronteras internacionalmente reconocidas. Expresaron su preocupación por los recientes acontecimientos en los territorios palestinos ocupados y concordaron en la urgencia del inicio de negociaciones, basadas en las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas, que lleven al ejercicio por el pueblo palestino de sus derechos inalienables a la autodeterminación y a la independencia en su propio territorio. Manifestaron su apoyo a la convocatoria de la Conferencia Internacional de Paz para el Medio Oriente, bajo los auspicios de las Naciones Unidas con la participación de todas las partes interesadas, como paso inicial en la búsqueda de la solución para el conflicto.

7.Resaltaron el respaldo de la comunidad internacional a la resolución de la XLI Sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas por la que fue declarada la zona de paz y de cooperación en el Atlántico sur, y señalaron la importancia de que todos los Estados la respeten como tal y contribuyan para la completa implementación de los objetivos de dicha declaración.

8. Reiteraron la importancia trascendental que atribuyen, en el marco de los esfuerzos en pro de la paz y la estabilidad en América Central, al procedimiento para establecer la paz firme y duradera, adoptado por los jefes de Estado de los cinco países del área en Guatemala, el 7 de agosto de 1987, y cuyo valor histórico e importancia se ratificaron en San José, el 15 de enero último. Coincidieron en que los compromisos de Guatemala, cuya concepción y espíritu se reconocieron como vitales para el logro de la democratización y la pacificación de la región en la declaración conjunta de San José; son prueba fehaciente de que los gobiernos centroamericanos están perfectamente capacitados para identificar soluciones propias para la crisis que afecta la región; en tal contexto, los dos presidentes instan a los países con vínculos e intereses en el área, a que se abstengan de cualquier actitud tendiente a obstaculizar el éxito de esta iniciativa de paz genuinamente latinoamericana.

9. Reafirmaron su empeño en seguir apoyando y estimulando la actuación del grupo de Contadora, cuya acción mediadora, con el respaldo político del grupo de apoyo, se ha revelado de fundamental importancia para la búsqueda de una solución pacífica y negociada del conflicto centroamericano. Se congratularon por la labor realizada hasta el momento por la comisión internacional de verificación y seguimiento, de la que, conjuntamente con los gobiernos centroamericanos y los secretarios generales de las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos, son miembros los gobiernos integrantes de los grupos de Contadora y de apoyo. Tomaron nota, con satisfacción, de los avances logrados en cada uno de los países centroamericanos con miras a lograr el cumplimiento integral de los acuerdos.

10.Ambos mandatarios se congratularon por los positivos resultados alcanzados durante la histórica reunión cumbre del Mecanismo Permanente de Consulta y Concertación Política, que tuvo lugar en Acapulco, México, del 27 al 29 de noviembre de 1987. Manifestaron su firme convicción de que los postulados incorporados al documento "Compromiso de Acapulco para la paz, el desarrollo y la democracia", constituyen la base para consolidar en un inmediato futuro, el proceso de unidad latinoamericana.

11.Coincidieron así mismo, en que el Mecanismo Permanente de Consulta y Concertación Política se constituye en una de las principales instancias de un proceso más amplio de entendimiento regional, que ofrece otra de sus múltiples dimensiones en los grandes esfuerzos que Colombia y Brasil vienen desarrollando en diversos organismos especializados de carácter regional, como es el caso de la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI) y el sistema económico latinoamericano (SELA).

Reconocieron que, al igual como se ha puesto de presente en otros foros, entre ellos El Consenso de Cartagena y los Grupos de Contadora y Apoyo, la existencia y funcionamiento de dicho mecanismo demuestra, más allá de toda duda, que los países de América Latina están hoy en condiciones de alcanzar, sin propósitos de confrontación y por la vía del diálogo y el entendimiento, soluciones genuinamente regionales para afrontar los problemas que los afectan.

12. Los dos mandatarios resaltaron que La Reunión de Presidentes del Grupo de los Ocho, a realizarse en Uruguay en el segundo semestre del presente año, marcará la continuidad del proceso de concertación política al más alto nivel a cuya consolidación Colombia y Brasil han contribuido con sus mejores esfuerzos.

13.Los dos jefes de Estado, al reafirmar su compromiso con los ideales de paz, libertad y democracia, propósitos y principios que inspiran la política exterior de sus respectivos países. expresaron su satisfacción por el creciente fortalecimiento del sistema democrático en el continente. Reiteraron su convicción de que la democracia, por su naturaleza pluralista y participativa, es indispensable para el ejercicio de la justicia social y constituye el mejor sistema político para promover la defensa y la garantía de los Derechos del Hombre. Reconocieron, además, que la consolidación democrática en América Latina está íntima y directamente relacionada con el crecimiento y la estabilidad económica en la región, hoy seriamente amenazada por el gobierno de la deuda externa.

14. Al considerar que el respeto irrestricto de los derechos inalienables de fe persona humana es un componente esencial de la democracia, reiteraron el firme propósito de sus gobiernos de proteger y garantizar ampliamente esos derechos en el ámbito de sus jurisdicciones nacionales, comprometiéndose a unir esfuerzos para la defensa y promoción de los mismos en los foros internacionales competentes.

15. Los dos jefes de Estado reconocieron la necesidad de establecer un ordenamiento jurídico internacional especial que, atendiendo las necesidades de los países en desarrollo, regule adecuadamente la racional utilización de la órbita sincrónica geoestacionaria.

16. El presidente del Brasil expresó su decidido respaldo a la iniciativa del presidente de Colombia de llevar a cabo, a nivel regional, una campaña internacional para erradicar la pobreza absoluta. En este sentido, los dos estadistas se comprometieron a adelantar las acciones pertinentes con miras a identificar áreas de interés común, intercambiar informaciones y experiencias y participar activamente en todo cuanto contribuya a la creación de empleo, el mejoramiento de las condiciones de vida de sus pueblos y la elevación del nivel de servicios básicos de salud, educación, nutrición y vivienda, pues ellos son los medios para obtener la recuperación de la dignidad humana. Los dos jefes de Estado dejaron constancia de que el apoyo expresado a la lucha contra este flagelo, que agobia a apreciables sectores de la población de sus respectivos países, por organizaciones internacionales como las Naciones Unidas, la OEA, el SELA y las entidades financieras de carácter intergubernamental, estimula de manera decisiva a sus gobiernos para proseguir la acción de exhortación hemisférica en que están empeñados, la cual tiene como finalidad obtener la cooperación de los países altamente industrializados y de otras agencias internacionales, incluidos los mecanismos multilaterales de crédito.

17. Expresaron su preocupación por la intensificación del uso indebido y del tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias psicotrópicas y reconocieron la importancia de la cooperación internacional en la lucha contra tales manifestaciones delictivas. En este contexto, reiteraron la disposición de sus gobiernos de cooperar intensamente para la prevención y represión de dichas actividades.

18. Reiteraron su apoyo al tratado de cooperación amazónica, cuya finalidad de impulsar el proceso de integración entre los países de la región ha sido plenamente activada gracias a la determinación de los gobiernos de los Estados miembros, a pesar de las dificultades derivadas del largo período de recesión económica por el que han atravesado la mayoría de los países la presente década.

19. Manifestaron su apoyo al plan de. acción de Secretaria Pro Tempore del Consejo de Cooperación Amazónica, registrando con satisfacción la celebración del Seminario Sobre Alternativas Tecnológicas p: las Telecomunicaciones en la Región Amazónica, Encuentro Técnico para Examinar el Plan de Acción Botánica y del Encuentro Técnico para Examinar Plan de acción en Salud.

El presidente Barco destacó la fructífera labor desarrollada por la Secretaría Pro Tempore durante gestión brasileña, plasmada en los logros alcanza hasta el momento.

20. Consecuentes con el espíritu y orientación propio tratado de cooperación amazónica, así como la actitud flexible y realista que ha caracterizado muchas de las modalidades de cooperación que se producido bajo su ámbito, expresaron su apoyo a iniciativas subregionales que abarquen dos o más tratados, particularmente en lo que respecta a la cooperación para el desarrollo económico y social en las regiones fronterizas. En el mismo sentido, se comprometieron a buscar los medios para explorar, con imaginación y creatividad, las potencialidades del instrumento multilateral.

21. Reconocieron, además, la necesidad de asignar el tratado de cooperación amazónica el papel de instituible factor de promoción del mutuo conocimiento entre los países miembros, asignándole particular importancia a las áreas de colaboración técnica, cinética y tecnológica, las cuales se muestran en la actualidad como aquellas que se quieren en una atención cada mayor.

22.Destacaron la necesidad de dedicar una atención constante a la cuestión ambiental de la amazonia en especial, teniendo en cuenta que los países amazónicos asumieron la responsabilidad exclusiva de la preseación del medio ambiente de la región. Señalaron canalización por los dos países de recursos internos y externos para proyectos ambientales en la amazonia debe ser compatible con sus respectivas políticas nacionales

23.Reiteraron la conveniencia de intercambiar regularmente información sobre las medidas de preservación con del medio ambiente que se aplica en los dos países así como la disposición de sus gobiernos de promover acciones coordinadas en los foros internacionales apropiados, sobre iniciativas de cooperación internacional en cuestiones ambientales.

24. Reafirmaron la importancia que le atribuyen a la cultura como factor indispensable del desarrollo integral de sus pueblos, y único valor capaz de asegurar que dicho desarrollo se alcance dentro del estricto respeto de los más profundos anhelos nacionales, permitiendo a través del libre ejercicio de la creatividad, la consolidación de la identidad cultural regional.

25. Al comprobar que existen importantes coincidencias de posiciones en cuanto a las maneras más apropiadas de resolver muchos de los problemas que hoy enfrenta América Latina, acordaron señalar, como imperativa, la necesidad de dar un renovado impulso al proceso de integración regional. En este sentido, ambos mandatarios atribuyen la más alta prioridad a los esfuerzos que se desarrollan en el ámbito de la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI) y ratificaron su propósito de cooperar activamente a fin de " asegurar una adecuada participación de sus gobiernos, con criterios flexibles y realistas, en la ronda de negociaciones que actualmente se está llevando a cabo.

26. Reiteraron la importancia que sus gobiernos le atribuyen al sistema económico latinoamericano (SELA) y sus esfuerzos para la coordinación y cooperación entre los países de América Latina y el Caribe. Colombia y Brasil consideran firmemente que la cooperación intra-regional es un elemento esencial para acelerar el desarrollo económico y social que los países que participan del sistema, y que el mecanismo de consulta y coordinación fortalece la posición común sobre temas económicos.

27. Los dos presidentes reiteraron su profunda inquietud por los graves desequilibrios que persisten en la economía mundial, los cuales contribuyen al progresivo aumento de los desniveles ya existentes entre países desarrollados y países en vía de desarrollo. En este sentido, ambos mandatarios ratificaron su preocupación por que el problema de la deuda externa se ha constituido en instrumento recesivo de las economías de los dos países y coincidieron en señalar que los resultados alcanzados hasta ahora para superar este problema son insuficientes y que toda solución viable debe contemplar como condición necesaria el crecimiento sostenido de lo; países deudores, teniendo en cuenta que el servicio de la deuda debe ajustarse a la capacidad de pago de caria país, así como de la necesidad de establecer fórmulas de contingencia que atenúen el impacto negativo de factores externos ajenos al control de los países deudores. Dentro de este contexto resaltaron la importancia de las propuestas formuladas en el compromiso de Acapulco y reiteraron su firme voluntad de continuar desplegando sus esfuerzos con miras a obtener una solución definitiva del problema de la deuda externa.

28. Los dos mandatarios registraron con profunda inquietud la proliferación de medidas proteccionistas en los países industrializados, en su mayoría contrarias a los compromisos internacionales por ellos contraídos y representadas en subsidios, restricciones cuantitativas, acciones de salvaguardia, derechos compensatorios, medidas antidumping y represalias comerciales, así como la adopción de políticas de condicionamiento. La concertación de los acuerdos llamados voluntarios de restricción de las importaciones y la limitación y desnaturalización de sus sistemas de preferencias

29.Instaron a los gobiernos de los países industrializados a cumplir los compromisos que han contraído en relación con el comercio con los países en vía de desarrollo, y a respetar los acuerdos concluidos con ocasión del lanzamiento de la Ronda Uruguay de Negociaciones Comerciales Multilaterales, en especial aquellos relacionados con el statu-quo y con el desmantelamiento de las medidas proteccionistas.

30.En clara coincidencia y entendimiento mutuos, estuvieron en completo acuerdo en que las relaciones entre los dos países se hallan en excelente estado. Destacaron, que existen espacios significativos a ser explorados, con miras a la intensificación de las relaciones y a la búsqueda conjunta de oportunidades sobre todo en el área económica, de cooperación creciente, tendientes a una mejor integración y complementación. Recordaron que la reciente visita del canciller Abreu Sodre a Colombia, el 12 de junio de 1987 y las diversas misiones gubernamentales y empresariales que tuvieron lugar en los últimos doce meses, fueron extremadamente útiles para el proceso de integración entre los dos países. Esta visita del presidente Sarney, así como también la visita del presidente Barco al Brasil en un futuro próximo, representan un firme y decidido impulso a las relaciones bilaterales.

31. Recalcaron la importancia del acuerdo de asistencia recíproca para la prevención, control y represión del uso y tráfico ilícitos de sustancias estupefacientes y' psicotrópicas, suscrito el 12 de marzo de 1981, e indicaron el firme propósito de continuar intensificando la cooperación en esa área específica, utilizando para ello los mecanismos previstos en la comisión mixta creada en virtud de dicho instrumento y en el ámbito de la comisión de coordinación colombo-brasileña.

32. En materia de cooperación fronteriza, los jefes de Estado de Colombia y Brasil compartieron el interés recíproco en promover el desarrollo socioeconómico de las regiones fronterizas, dando énfasis al mejoramiento del estado de vida y servicios, así como las condiciones de, infraestructura necesaria para los asentamientos humanos y el aprovechamiento racional de los recursos económicos existentes en esas regiones.

33. En este sentido, los presidentes señalaron, con igual satisfacción, la conclusión del protocolo de cooperación para el desarrollo de la región fronteriza, que representa un esfuerzo integrado para el mejor conocimiento de esa región común a las respectivas economías nacionales.

34. Destacaron en la misma forma, el inicio de los trabajos, el 31 de julio pasado, de la Comisión Mixta