REFLEXIONES SOBRE EL PECC Y EL PBEC

David Barriga

Director Ejecutivo del PBEC.

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33-36

01/10/1997

01/10/1997

Antes de entrar en detalle de lo que fue la reunión en Manila y de reflexionar sobre el PBEC, me gustaría hacer una breve introducción de lo que es el PBEC y lo que significa para Colombia.

El PBEC, cuya sigla significa Consejo Económico de la Cuenca del Pacífico, es un organismo de cooperación del sector empresarial de las economías de la región, cuyo principal objetivo es el fortalecimiento de las relaciones comerciales a través de la inversión extranjera, la expansión del comercio de bienes y servicios y una sana competitividad de las empresas. Esta definición resume la esencia de lo que es el PBEC, que es considerado y reconocido como la voz de los negocios del Pacífico. El PBEC surgió en 1967, hace 30 años y precisamente por los resultados de la investigación en la Universidad de Standford que fue contratada por el comité de cooperación del Japón-Australia para hacer un análisis sobre el futuro de lo que iban a hacer las economías más desarrolladas del mundo; la investigación concluyó que la Cuenca del Pacífico se iba a convertir en el área más dinámica y de mayor potencial económico del mundo. La investigación fue bastante acertada; hoy por hoy representa el 54% del comercio mundial con un alto índice del crecimiento del producto interno bruto en la mayoría de sus economías, y con un altísimo volumen de negocios que superan los 4.300 billones de dólares. La recomendación de ese estudio que hizo la Universidad de Standford fue que se creara un organismo empresarial de carácter privado de las economías, para que se organizaran y trabajaran en los temas que les interesaba a cada uno de ellos. Fue así como Estados Unidos, Japón y poco a poco otros países se fueron integrando hasta completar 20. La última recientemente aceptada fue Ecuador. Actualmente forman parte, Australia, Canadá, Chile, China Popular, Colombia, Corea del Sur, Ecuador, Estados Unidos, Fidji, Filipinas, Hong Kong, Indonesia, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Taiwán y Tailandia. Al igual que en el PECC, las consideraciones políticas se dejan de lado y se habla de economía. Hong Kong sigue con su carácter especial y continúa siendo parte del PBEC, a pesar de que se haya reinsertado nuevamente a la China.

La forma en que opera el PBEC internacional es a través de los comités nacionales, los cuales están coordinados o representados por asociaciones empresariales, por gremios del sector público, por cámaras de comercio que tienen un interés particular en desarrollar el tema en cada país. Existe un secretariado internacional que tiene sede en Hawai quien coordina toda la parte administrativa, operativa y logística, que un comercio de este nivel exige. El PBEC está conformado y dirigido por una Junta Directiva del cual hacen parte los presidentes de la junta directiva de cada comité nacional, y quienes son en líneas generales los que definen en el futuro los lineamientos de hacia dónde debe continuar trabajando el consejo; unos comités técnicos que tienen a su cargo cuestiones mucho más estratégicas financieras, contables y de inversión de los mismos recursos que maneja el PBEC, y unos comités de trabajo que son la esencia y el alma de lo que es el PBEC. Los comités nacionales, a su vez, están conformados por afiliados de empresas en su mayoría del sector privado que representan a los más diversos sectores textiles, químicos, electrónicos, informáticos, comercializadoras, minería, farmacéutica, en fin, en total son 1.200 empresas


que están afiliadas y pertenecen al PBEC internacional. Algunas de ellas son Motorola, Mitsubishi, Ford, Honda, IBM, Sony, Exon, Texas Instruments, Daewoo, entre otras.

Colombia ingresó oficialmente al PBEC en 1994 cuando fue aceptada en la Asamblea General que se realizó en Malasia. A partir de entonces, se constituyó en Colombia la corporación PBEC que está conformada por una junta directiva, cuyo presidente es Germán Jaramillo, presidente de Confecámaras y cuyo presidente ejecutivo es Guillermo Fernández de Soto, presidente de la Cámara de Comercio de Bogotá. Existe una junta directiva elegida por la asamblea; en este momento hacen parte del comité colombiano del PBEC unas 50 empresas y el desarrollo como tal ha contado con un valioso apoyo y decidida colaboración de la Cámara de Comercio de Bogotá que la tiene inserta dentro de su estructura, y también con el apoyo de las 50 empresas afiliadas, la mayoría del sector privado; podemos resaltar entre ellas a la Federación Nacional de Cafeteros, Carvajal, Leonisa, Várela, así como agremiaciones como la Andi, Analdex, Asocolflores, Acopi, Confecámaras, Banco de Occidente, Sociedad Portuaria del Pacífico, Zona Franca de Buenaventura, Paveo, Cámaras de Comercio de Medellín, Cali, Bucaramanga. Adicionalmente se encuentran Proexport y algunos otros organismos del Gobierno, que también han trabajado muy de cerca el tema y que les interesa explorar mucho más el área del Pacífico. La importancia que representa para Colombia pertenecer a este organismo internacional es innegable. Debemos reconocer que hacer negocios con el ASPA Pacífico no resulta económico y exige unos niveles de inversión importantes; además, los resultados no se ven en el corto plazo y eso también tiene mucho que ver con la forma en que se hacen negocios en el Asia Pacífico en donde son procesos que pueden durar varios años y es a mediano y largo plazo que se van a ver los beneficios de una inversión presente. Para Colombia, particularmente para los empresarios de Colombia, ser miembro del PBEC le da la posibilidad de tener voz y voto en los temas más trascendentales en economía y comercio que trabajan los comités de trabajo del PBEC. Actualmente el PBEC trabaja en unos comités que discuten cada uno ciertos aspectos, cada uno está bien caracterizado como barreras administrativas que influyen negativamente en el flujo normal, ágil y eficiente de las mercancías y de los servicios de un país a otro, pasando por temas ambientales, productos alimenticios, inversión extranjera, tecnología, servicios de desarrollo humano. En la última asamblea que se realizó en Manila, se aprobó la creación de un nuevo comité de transparencia, que básicamente va a tratar los temas de corrupción la cual se constituye como uno de los principales flagelos y obstáculos que impiden la inversión extranjera, y las consideraciones de una empresa que va a realizar una inversión extranjera en otra nación. El Asia Pacífico no es ajeno a esa problemática y, por lo tanto, se consideró oportuno crear un comité especial que trabajara en el tema. En Colombia estamos haciendo toda una campaña de concientización a nuestras empresas de lo importante que es pertenecer a estos comités de trabajo, pertenecer no de una forma pasiva sino activa, elaborando documentos, presentado sus ponencias y definiendo sus intereses, porque de alguna manera es la posición de ellos como empresa, pero también de Colombia. Se debe definir cuál es nuestra estrategia hacia el Pacífico. En este momento estamos haciendo un proceso de recolección de información para que las empresas se vinculen y adquieran una serie de compromisos que les va a permitir intercambiar información, hacer conclusiones y estructurar lo que deben ser estos temas en el Pacífico. Existen dificultades de tipo operativo y logístico, ya que estos comités se reúnen por lo menos dos veces al año y las reuniones son en lugares bastante lejanos; la última, por ejemplo, fue en Nueva Zelanda y no es fácil para una empresa viajar y estar durante cinco días en un país tratando estos temas. Sin embargo, ya las telecomunicaciones, el internet, el correo electrónico, las conferencias, etc., están acercando mucho más a estos grupos de trabajo, de tal manera que ya no va a ser tan lejano, ni tan difícil para nosotros como empresarios de Colombia participar en estos temas; adicionalmente, los empresarios de una u otra forma ya están trabajando en temas muy similares ya sea por los mismos procesos de integración que estamos viviendo de ALCA o Mercosur que así lo exigen. Además, las otras instituciones y gremios han visto la necesidad de que Colombia defina su estrategia y el camino que hay que seguir en cada uno de estos temas; así que se están dando todos los pasos para que tengamos un mayor protagonismo y podamos dar una opinión mucho más cercana desde el punto de vista colombiano.

Lo más importante de estos comités del PBEC es que están trabajando más de cerca, ya sea con PECC o con APEC para analizar y llevar a mayores detalles estos temas, y llevarlos también a otras instancias; sus gobiernos lo llevan a organismos mundiales como la Organización Mundial de Comercio (OMC) para que realmente sean consideradas y tenidas en cuenta las propuestas y sugerencias que están haciendo estos comités de trabajo. Estas propuestas son analizadas al interior de cada comité; se presenta un informe anual aprovechando la asamblea general y la junta directiva aprueba o no las actividades y los proyectos que están trabajando y, finalmente, pasan a las siguientes estancias ya gubernamentales para que de alguna manera se implementen y tengan unos resultados concretos.

No debemos olvidar que el sector empresarial es el verdadero motor de la economía, que debe convertirse en el proveedor de ideas y sugerencias para que se convierta en un importante interlocutor ante el Gobierno; es fundamental que el sector empresarial, el Gobierno y la academia trabajen coordinadamente. Si cada uno está trabajando aisladamente, los esfuerzos se van a ver diversificados y no van a tener el mismo impacto.

La APEC y el PBEC permiten ese intercambio y ese flujo normal de información y de coordinación para que finalmente se vean resultados, para nosotros como economía es imposible tener la conciencia de que no podemos estar al margen de este tipo de foros. Somos conscientes también de que es difícil, de que exige muchísimo recurso de tiempo y de inversión y de alguna manera hay mucho camino por recorrer; pero el hecho de que nos aislemos, de que no sepamos de este tipo de foro, aleja más la posibilidad de acceder a nuevos y potenciales mercados. Cuando nosotros vendemos la idea al sector empresarial del PBEC, la hacemos con la idea de que van a ver sus resultados a mediano y largo plazo; que por el hecho de que viajen, de que tengan una misión empresarial organizada por el comité y se reúnan con otros empresarios, no necesariamente van a obtener allí la firma del contrato y el negocio hecho, sino que de alguna manera esas relaciones y esos vínculos que hacen parte de la misma cultura de negociación de la región le van a ayudar para que facturen 2-3-5 años, y puedan concretar o consolidar un negocio. La posibilidad de poder discutir en estos grupos de trabajo con el presidente de Motorola, con el presidente de Sony y otras empresas importantes le abre una cantidad de posibilidades maravillosas al empresario colombiano; si bien nosotros estamos muy lejos de ser líderes en cualquiera de estos temas que trabajan estos diferentes comités, podemos aprender muchísimo de ellos, conocer sus estrategias comerciales, tenemos que aprovechar este tipo de espacios. Un ejemplo concreto es el caso de Semes, la secretaría mexicana que tiene inversiones aquí en Colombia. Esta empresa ha adoptado el PBEC en su país, es la coordinadora principal del comité mexicano y ustedes vieron la agresividad con que ellos están vendiéndose ya como empresa a través de este espacio en las participaciones que hacen en los comités de trabajo, en la asamblea general a través de medios, de boletines; ellos se están vendiendo como país, como economía y están vendiendo su empresa; esto tiene que ser bastante claro en los empresarios colombianos.

El presidente del PBEC internacional, Gary Toker, quien es también el presidente de Motorola y tiene una vasta experiencia, ha definido una estrategia comercial con el Asia Pacífico y de alguna manera utiliza este tipo de foros para aumentar negocios y tener oportunidades estratégicas con las empresas de la región; creo que de alguna forma los colombianos también debemos utilizar este tipo de espacios y ser más estratégicos en trabajarlo.

En mayo de 1997 se realizó la asamblea general en Manila. Éste es el evento empresarial más importante que tiene el PBEC, que se hace una vez al año porque reúne y congrega en una sola vez a todos los representantes delegados, y empresas afiliadas al PBEC. La asamblea general está dividida en varias partes, unas que son reuniones internas de los comités de trabajo, de los comités nacionales, y otras que son las sesiones plenarias que son mucho más abiertas y a las cuales invitan a una gran cantidad de conferencistas interesados en el tema del Pacífico. En la reunión de Manila asistieron alrededor de unas 70 personalidades, desde presidentes de varios países hasta ministros, conferencistas especializados en los temas; allí se permitió el intercambio de experiencias, se comentó el futuro de lo que va a ser la región, los problemas, los retos que deben enfrentarse para salir adelante. Hay actividades de tipo social que permiten un intercambio ya más de tipo personal que también es muy valioso.

De la misma manera, en la reciente asamblea de Manila participaron alrededor de 600 delegados, un número que es algo inferior a lo que ellos siempre esperan que son entre 800 y 1.000 personas, 600 delegados algunos de los cuales unos 60 o 70 eran de Japón. México estuvo representado por unas 20 personas, Chile y Ecuador con unas cantidades menores, la segunda delegación más importante fue Colombia que estuvo con 15 personas, entre quienes estuvieron la doctora María Emma Mejía como conferencista, el doctor Rodrigo Villamizar, Proexport, Confecámaras, Carbocol, la FEN; fue una gran cantidad de personas del más alto nivel que le dieron también altura a la delegación colombiana. Dentro de los variados conferencistas que estuvieron por parte de otros países me gustaría resaltar a la señora Anson Chang, quien es la secretaria general de Hong Kong que ha estado involucrada en todo el proceso de transición de este país a la China. Ella hizo una magnífica exposición de cuáles eran las perspectivas de Hong Kong al futuro. Conocer esto de primera mano, tener una visión tan cercana y poder discutirlo y conversarlo con estas personas es una oportunidad muy valiosa.

Cada vez más México y Chile, de alguna manera con sus relaciones ya culturales que tienen con el Japón, están haciendo cada vez más relaciones cercanas a los países del Pacífico, tratando de atraer inversión extranjera; no por casualidad la próxima asamblea general se va a hacer en Santiago de Chile; fue una campaña que hicieron desde varios años atrás los chilenos, para que finalmente fuera aprobada en su país la reunión anual, donde esperan que lleguen por lo menos mil delegados. Esto va a ser del 8 al 13 de mayo de 1998 en Santiago. Ojalá Colombia tome allí una posición de mucho más liderazgo, la misma cercanía geográfica y cultural lo permite; esperamos todos que podamos organizar un grupo mayor de empresarios colombianos y que la representación y delegación de nuestro país, realmente, cause impacto y saquemos el mayor beneficio.

Nuestras empresas deben conocer y reconocer, cuál es el riesgo de no estar pendientes de las economías del Asia. Nosotros no podemos decir que la China o Taiwán o Singapur no son competencia para nosotros, porque están bastante lejos; pero eso no es cierto, cada vez vemos más invadido nuestro mercado con productos de estas naciones; entonces, nosotros debemos estar allí presentes conociendo cuáles son sus expectativas, cuáles sus estrategias, en qué están trabajando, cuáles son sus negocios al futuro, no solamente para saber lo que están haciendo ellos como competencia, sino para trabajar conjuntamente haciendo alianzas e inversiones en nuestro país; en fin, para que seamos puente en América Latina de los productos de ellos.

Existen muchas posibilidades que ya dependen de la imaginación y creatividad de nuestros empresarios para que las utilicen; la competitividad no la están dando las naciones sino las empresas; yo creo que allí nosotros debemos también ser mucho más fuertes y tomar la delantera.

De la habilidad y claridad con que nosotros realmente definamos una estrategia en el Pacífico también dependerá el éxito que a mediano o largo plazo tengamos nosotros a nivel económico; el 54% del comercio es canalizado por esa área y nosotros no podemos desconocer esto, no podemos solamente sentarnos a negociar con el Grupo Andino, Mercosur y Estados Unidos, sino que realmente debemos abrirnos mucho más, así consideremos que sean un poco lejanos y que nos va a tomar varios años, pero tenemos que empezar desde ya. Ya México y Chile están viendo resultados, y Perú a muy corto plazo va a ver resultados concretos. El sector privado colombiano, como lo mencioné antes, deberá trabajar muy de cerca con el Gobierno y la academia, en la estructuración de un sólido plan de crecimiento concertado y basado en las potencialidades de nuestra gente y nuestros recursos, recursos que no queremos hacer énfasis también en los temas de materias primas de recursos naturales, porque creemos que debemos pensar también en darle valor agregado a esos productos para que realmente pasemos a otra etapa más desarrollada en nuestra economía.

Los espacios se están dando; ya somos miembros activos del PBEC, miembros activos del PECC y esperamos en un futuro ser miembros del APEC. Yo creo que esos son los cimientos y las bases para que podamos construir a nivel económico un futuro mejor. Ahí están dadas las condiciones, hay que hacer mayores esfuerzos y foros como el PBEC están en total disposición para que así sea.