Antes y después de la modernización de Japón: Entrevista con el profesor Kaoru Iokibe


John Cameron, Traffic free shopping on a Sunday in Ginza, Tokyo [Fotografía digital], 2018.

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La historia nos da perspectiva, nos permite reconocer las consecuencias de decisiones pasadas en el presente y trazar el camino al futuro con mayor certeza.

En esta ocasión, hablamos con el Dr. Kaoru Iokibe, profesor de la Universidad de Tokio y especialista en la historia de la política y la diplomacia japonesa. Él nos guía en un viaje a través del periodo Edo, el periodo Meiji y el Japón contemporáneo, y nos muestra el potencial de la historia para conectar el pasado con el presente y el futuro.

El profesor Iokibe nos cuenta sobre el proceso de la modernización japonesa y su relación con las transformaciones y retos actuales del país. Así mismo, revela éxitos y fracasos de la política y la diplomacia japonesa, y su impacto tanto en la sociedad japonesa como en las de otras regiones del mundo.

Samurais Satsuma durante el periodo de la guerra boshin (戊辰戦争 Boshin Sensō) [Fotografía análoga, pigmentación análoga], 1868/1869.

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¿Qué lo llevó a enfocar su carrera en la historia, la política y la política exterior japonesa?

Mi carrera es muy aburrida. Me sorprende esta pregunta, soy tan solo un humilde historiador, pero creo que puedo explicar por qué me convertí en historiador. Fue por la Guerra del Golfo, la invasión iraquí de Kuwait que tuvo lugar en 1990. Estados Unidos, el Reino Unido y otros aliados lucharon contra Irak para liberar Kuwait. Era un momento en que teníamos un sueño de cooperación internacional, justo después del final de la Guerra Fría. Japón no se pudo unir a ese esfuerzo por su pacifismo de larga data. El Artículo 9 de la constitución exigía que no luchara en el extranjero e incluía igualmente una restricción para el armamento. Por eso, Japón no pudo participar y solamente envió dinero después de la presión internacional.

Coincidentemente, yo estaba en ese entonces en Inglaterra, viviendo en un dormitorio de una escuela pública británica. Y Japón era muy impopular. La gente a mi alrededor, amigos británicos, españoles y de Hong Kong, me criticaban, “Japón no está haciendo nada”. Hubo muchos debates e incluso enfrentamientos físicos. En esa época yo estaba muy avergonzado y sentía que Japón era un país muy poco amable con sus compatriotas en el exterior. Japón no se explica bien y eso causa dificultades para los japoneses que viven en el extranjero, quienes terminan teniendo que explicar en su lugar.

El final de la Guerra Fría para Japón no fue el colapso de la Guerra de Vietnam sino la Guerra del Golfo y el sentido de humillación que tuvo Japón. Yo pensé “bueno, entonces la guerra va a terminar y el pacifismo japonés o la diplomacia centrada fuertemente en la economía, en la mente de la gente, debe terminar, ser modificada. Así, deberíamos actuar como un país más ‘normal’, en cierto sentido”. Entonces, yo creo que es bueno mirar hacia atrás, a la época antes de la guerra, cuando Japón actuó como un poder político y militar. Hubo cosas buenas, pero también hubo desastres. Deberíamos examinar y aprender de eso. Por esa razón me convertí en historiador.

Retrocedamos un poco en el tiempo al Japón de Meiji, uno de los periodos históricos que ha investigado. ¿Cuáles fueron los cambios más significativos en relación con el periodo Edo?

En una palabra, es la meritocracia. La gente encuentra su posición de acuerdo con su habilidad y su voluntad. Eso es lo que logró la Restauración Meiji. En muchos países no podemos hacer eso a causa de alguna discrepancia o un régimen autoritario. La Restauración Meiji fue una revolución milagrosa lograda por muy pocos señores feudales. Tenían cargos importantes en el gobierno, pero no podían cubrirlos todos, por eso tuvieron que introducir el sistema de meritocracia, y lo lograron. Pienso que este es un logro importante.

En comparación con Meiji, en el periodo Edo, que también fue una gran era, tuvimos mucho desarrollo de las artes y de la literatura, del cual aún disfrutamos y nos beneficiamos en la actualidad. Si conducen por cualquier lugar de Japón, encontrarán que cada lugar tiene su propio producto particular, buena comida o arte, y eso es gracias al periodo Edo. Pero era un sistema feudal, había un shogun a la cabeza, señores feudales, samuráis y, más abajo, comerciantes y campesinos. Las personas no podían elegir su propio oficio.Había mucha frustración con el feudalismo y el periodo Edo y los más miserables eran los samuráis y los señores feudales, ya que eran bastante pobres, pero conservaban el orgullo de gobernar y no podían convertirse en comerciantes o campesinos para enriquecerse. Por eso, algunos de ellos decidieron hacer una revolución: la Restauración Meiji. Formaron el gobierno, disolvieron la sociedad de clases del feudalismo, e hicieron una nueva sociedad de meritocracia. A partir de esto también podemos explicar el éxito del Japón moderno. Entonces sí, el periodo Edo fue fascinante, pero carecía de meritocracia y la Restauración Meiji logró implementarla.

El periodo Meiji fue el inicio de la modernización de Japón ¿Cuál fue el impacto de la modernización en la sociedad, la cultura y las artes japonesas?

Cuando Japón abrió el país a mediados del siglo XIX, tuvimos que iniciar el comercio exterior. Encontramos muchas cosas fascinantes de afuera y empezamos a comprarlas, y eso fue bueno. Sin embargo, tuvimos un problema de déficit comercial: teníamos demasiadas importaciones y no podíamos exportar. Las artes tradicionales se desarrollaron significativamente durante el pacífico periodo Edo, que duró más de dos siglos y medio bajo el mandato del shogunato Tokugawa. Entonces, empezamos a exportar artes tradicionales, que se volvieron muy populares en el exterior.

Abrimos el país y comenzamos el comercio exterior hacia 1860, y logramos una rápida revolución industrial durante 1880. Tuvimos que sobrevivir más o menos dos décadas sin el establecimiento de la industria moderna, fue muy difícil y la exportación de artes tradicionales ayudó a Japón a subsistir. Las artes tradicionales pre-modernas alcanzaron su perfección después de la Restauración Meiji ya que para tener éxito en la exportación era necesario garantizar la calidad de artes como el nishiki-e o el ukiyo-e, hermosas pinturas japonesas. En comparación con el periodo Edo, en Meiji las artes tradicionales japonesas estaban bajo presión más severa para ser perfectas. Y lo logramos. Si comparan obras de ukiyo-e antes y después de la Restauración Meiji, las obras posteriores a la Restauración Meiji son mucho mejores y más estables.

Las artes pre-modernas ayudaron a Japón a sobrevivir su modernidad y las mismas artes alcanzaron su perfección y sofisticación en la era de la modernidad. Es una lógica interesante, ¿no? Tuvimos mucha discontinuidad antes y después de la Restauración Meiji, pero, por encima de eso, hay un sentido de continuidad a través de la Restauración Meiji y el arte tradicional es un ejemplo de esto.

¿Cuáles son las particularidades del proceso de modernización de Japón? ¿Hasta qué punto es diferente o similar a otros procesos de modernización en el mundo? ¿Qué legado y lecciones dejó este proceso?

Ese es un buen punto. Ya saben, he estado hablando acerca del éxito de Japón y si uno habla felizmente de su propio éxito, puede parecer tonto. Me gustaría decir algo diferente: Japón es simplemente afortunado. Japón es un archipiélago en el Lejano Oriente, eso significa que cuando Europa y Estados Unidos construyeron marinas fuertes pudo percibir la amºenaza rápidamente. Por eso, Japón pudo iniciar su esfuerzo de modernización desde un primer momento. Entretanto, si cualquier país en occidente intentaba colonizar Japón, sería muy difícil, estaba demasiado lejos y era un país insular.

A menudo digo que la fortuna de Japón es que pudo pasar por una construcción integral de su Estado nación. Si se está en Asia occidental o en alguna parte del Medio Oriente, siempre se está bajo presión de Europa, entonces uno tiene que concentrarse en el ejército. Si se expande el ejército se necesita mucho dinero y puede que se debilite la economía y haya muchas deudas.

No estoy diciendo que Japón tuvo éxito porque somos muy astutos o brillantes. Japón estaba en una posición afortunada, era consciente de la presión desde el inicio y tuvo largo tiempo para prepararse. Un líder como Toshimichi Ōkubo, quien estuvo a la cabeza de la Restauración Meiji, planteó la idea de que “Sí, necesitamos desarrollar fuerzas militares, pero aún tenemos mucho tiempo, no van a venir de inmediato entonces primero deberíamos desarrollar la economía”. Algunos líderes sugirieron: “Bueno, deberíamos desarrollar nuestra economía, pero para hacerlo necesitamos educar a nuestra gente. Invirtamos tiempo y dinero también en educación”. Otros dijeron, “Sí, eduquemos a nuestra gente, pero, para eso, tenemos que darles oportunidad y responsabilidad. Entonces hagamos una constitución y establezcamos la Dieta”. No es una fantasía. Realmente discutieron de esta manera.

Esto es lo que llamo una construcción integral del Estado nación. No solamente enfocado en lo militar sino en varios ámbitos simultáneamente. Por eso Japón pudo desarrollar sus fuerzas militares sin mucha deuda y mantener saneadas sus finanzas públicas. Posteriormente, Japón desarrolló un ejército moderno capaz de derrotar a China e igualar a Rusia. Esos fueron los dos trasfondos del éxito: la meritocracia y la construcción integral del Estado nación. Sí, Japón tiene muchos logros particulares y únicos, pero el segundo factor es gracias a su ubicación. Si estás en cierta ubicación, debes tomar cierto rumbo y Japón tuvo que hacer eso. Una lección es clara, siempre se necesita buscar la construcción integral del Estado nación, donde sea que se esté. Si uno está cerca a su amenaza es difícil, pero de algún modo debe encontrar cómo hacerlo. Esa es la única lección que podemos derivar del éxito de Japón.

Hablando de la modernización de Japón, ¿cuál fue su impacto en la región y en la segunda mitad del siglo XX?

Esa es una pregunta grande, no hay una sola respuesta. Les daré dos. La primera es esperanza para toda Asia. Japón logró la modernización y fue probablemente el primero fuera de Europa y Estados Unidos. Luchó contra Rusia de 1904 a 1905 y fue una victoria reñida, pero ganó. Esto produjo sorpresa, asombro y también le dio esperanza a la gente en Asia que estaba bajo la opresión de occidente. La gente en Turquía y en India se emocionó, especialmente intelectuales y políticos, “probablemente podamos hacer algo similar”, y eso cambió la historia del mundo. La segunda y última respuesta es amenaza para sus vecinos. Japón les dio esperanza a muchos países, pero para sus vecinos fue una potencia horrible. Fue el primer país modernizado con el primer ejército y marina modernizados en la región del Lejano Oriente. Si se estaba en la posición de China y Corea, era aterrador. Japón anexó Corea en 1910 y luchó contra China de 1894 a 1895, invadió el territorio al noreste de China (Manchuria) en 1931 e inició la guerra Sino-japonesa en 1937. Entonces, la amenaza se hizo realidad, y lamentamos mucho que haya sido así.

Si observamos el impacto de la modernización de Japón, hay tanto un lado bueno como uno malo. Si viajo por todo el mundo, encuentro a muchos grandes seguidores de Japón. Pero, si miro los medios de China o Corea, Japón aún recibe fuertes críticas por su mal comportamiento en el pasado. Este es un problema que aún tenemos hoy.

Creo que podemos explicar la situación actual de Japón desde esta perspectiva. En cuanto a lo que Japón debería hacer en el mundo, creo que hay tres ideas básicas. Una es profunda autorreflexión y fuerte pacifismo. Les hicimos cosas horribles a nuestros vecinos, entonces debemos comportarnos y concentrarnos en la economía. Tenemos una fuerza de autodefensa que es sustancialmente un ejército, pero no deberíamos agrandarla. Y deberíamos intentar hablar con China y Corea del Norte incluso si ahora representan una amenaza y un problema de seguridad para nosotros.

La siguiente idea es la de los nacionalistas japoneses anti-China y anti-Corea. ¿Por qué China y Corea están criticando todo el tiempo? Hicimos algo malo. Pienso que el 95% de los japoneses lamenta mucho lo que los japoneses hicieron durante la guerra. Pero esto fue hace más de 70 años y todavía hay muchas críticas. Tenemos que disculparnos y pagar por esto, y China y Corea tienen como un juego político con esto. A veces nos cansamos de eso. Hay personas que están empezando a discutir contra China y Corea, lo que está influyendo en la gente de derecha de Japón. La tercera idea es, creo, la que adoptó la administración de Abe, un primer ministro muy fuerte que ejerció hasta hace poco. Su idea era que sí, China y Corea pueden ser un poco molestos, pero no debemos reaccionar a ellos directamente. Hay muchos países que aman a Japón, a los japoneses, al manga y el anime. Entonces viajemos por el mundo, movilicemos su benevolencia hacia Japón para sobrepasar las críticas de nuestros vecinos y después tener una discusión racional con esos países. Esa es como la diplomacia de Abenomics. Aunque Abenomics es famoso por su política económica, yo creo que también hay una diplomacia de Abenomics. Eso es lo que hizo Abe. Yo creo que hizo un gran trabajo.

Actualmente, por el Covid-19, esa tercera idea no funciona. Es muy difícil que el primer ministro y otros ministros viajen alrededor del mundo. Por eso, los conservadores de derecha, que tienen la segunda idea, están retirando temporalmente su apoyo al gobierno del LDP1. Esa es una de las razones por las que el primer ministro Suga, sucesor de Abe, tuvo que renunciar, perdió el apoyo de los miembros del partido LDP. La gente piensa que falló en su reacción frente al Covid-19 pero también hay un trasfondo tácito, como expliqué. Su fuerte es la diplomacia, pero Suga no pudo hacerlo tan bien como Abe.

Guerra Japón - China, Japoneses humillan al país vecino [Grabado], 1894/1985.

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¿Qué diría que caracteriza a la política exterior japonesa actualmente? ¿cómo describiría las dinámicas de la diplomacia japonesa?

Bueno, la diplomacia japonesa actual es muy estable y aburrida, la alianza Japón-Estados Unidos es la principal prioridad. Es racional de cierta forma porque no se trata solo de que Japón siga a Estados Unidos, sino de que Estados Unidos siga a Japón. En décadas recientes, la prioridad de Japón es hacer que Estados Unidos se dé cuenta de que la principal amenaza es China. China está creciendo y muchos intelectuales en occidente esperaban que una vez que se enriqueciera fuera un actor responsable, pero de repente parece que no es el caso. Japón es consciente de eso porque está frente a China y por eso intentó ayudar a Estados Unidos y Europa a darse cuenta de la situación. Finalmente, Estados Unidos se dio cuenta y está intentando construir una política más cuidadosa y restrictiva hacia China. Entonces, parece que Japón está siguiendo, pero, realmente, Estados Unidos está siguiendo. Solo debemos lanzar una nueva iniciativa desde Japón.

La idea de FOIP2 es, en cierto sentido, involucrar a China y también enviar el mensaje de que necesita cooperar con nosotros, adherir a las ideas de libre comercio y asociación igualitaria entre estados soberanos, y alcanzar cierto nivel de democratización. FOIP fue una idea de Japón, introducida por el primer ministro Abe, que el presidente Trump de Estados Unidos aceptó. A Japón le ha ido muy bien recientemente y por eso, en cierto sentido, no tiene diplomacia nueva ahora. Aún así, tenemos un ministro de Relaciones Exteriores y está haciendo su trabajo rutinario muy bien. Entonces, básicamente, es aburrida, pero va muy bien.

¿Podría contarnos sobre éxitos y fracasos pasados y recientes de la diplomacia japonesa?

El éxito es obvio, la construcción del frente común frente a China. El fracaso es que Japón esta bajo un pacifismo fuerte y a veces es muy lento en reaccionar ante situaciones externas. Un fracaso reciente de la diplomacia japonesa es Afganistán. Japón se demoró en reaccionar ante el colapso del gobierno de Afganistán y aún hay mucho personal japonés haciendo labores diplomáticas y apoyando el desarrollo económico allá. Japón envió lentamente algunas aeronaves, pero, en la medida que la situación allá se intensificó, disminuyó su campaña, por eso muchos japoneses y también un número considerable de afganos que trabajaban en instituciones del gobierno japonés permanecen allá, probablemente temerosos de represalias por parte de los Talibanes. En campañas como esta no le va bien a Japón. Es la otra cara del pacifismo y la diplomacia centrada en la economía y es la frustración que sentí cuando estaba en Inglaterra durante la Guerra del Golfo. Como he dicho antes, el gobierno no es tan amable con sus compatriotas en el exterior. Eso es algo en lo que debemos pensar, es un asunto realmente importante.

Si uno mira al mundo desde la perspectiva de Japón como aliado de Estados Unidos, el “padre”, Joe Biden, está en el centro de la mesa y a su alrededor están los países de Europa y Latinoamérica que tienen buena relación con Estados Unidos. Fuera de la casa hay dos aliados importantes de Estados Unidos, uno es Japón y el otro es Israel. Creo que ese es el mundo desde la perspectiva japonesa. Japón es como un hermano rico, una persona agradable y tranquila. Pero tiene un pasado, un recuerdo histórico de haber hecho una emboscada a Estados Unidos en Pearl Harbor. El otro hermano, Israel, es más bien travieso y agresivo, y a veces tiene verdaderos combates con sus vecinos. Pero su recuerdo histórico es que tuvo un Holocausto. Fue una gran víctima y Estados Unidos ayudó a rescatarlo hasta vencer a la Alemania nazi. Entonces, una vez que Israel libra una guerra con sus vecinos, Estados Unidos tiene que ayudarle.

A propósito de la diplomacia japonesa, usualmente los japoneses no están interesados en el Medio Oriente, excepto para comprar petróleo. Pero el Medio Oriente es muy importante. Una vez que la situación allá se volvió inestable, Estados Unidos tuvo que concentrarse en ella. Esto significa que tiene menos poder y fuerza militar en Asia oriental para afrontar la presión de China. Por eso, en adelante, Japón realmente debe mirar alrededor del mundo y hacer lo mejor posible para estabilizar la situación. El primer ministro Abe, a pesar de todos los déficits, probablemente tenía un tipo de percepción globalizada. Pero la gente y sus sucesores aún no tienen esa percepción.

Japón parece más prudente en comparación con gobiernos por fuera de Asia cuando se trata de condenar conductas autoritarias o violaciones de derechos humanos por parte de otros gobiernos. ¿Piensa que es el caso? ¿Por qué?

Es el caso, y a veces es difícil, especialmente cuando estamos en el extranjero y amigos estadounidenses y europeos nos preguntan ¿por qué son tan prudentes? (Bueno, prudente es la palabra amable). ¿Por qué son tan lentos? ¿Por qué son tan poco serios cuando se trata de derechos humanos? Yo pienso que Japón comparte la idea básica de los derechos humanos, pero está en una posición algo única.

Japón es un país occidentalizado en Asia. Asia aún tiene muchos problemas políticos y la prioridad más alta de muchos países es el crecimiento económico, la democratización de derechos humanos viene después. A algunos países les está yendo muy bien. Si se elige a China es obvio, y si se mira a Asia oriental, por ejemplo, a Singapur, hay muchas maniobras en elecciones, pero le está yendo bien económicamente y la gente está generalmente satisfecha. Japón nunca hará una intervención militar, entonces respeta la situación doméstica de cada país. Sigue el rumbo común, pero a veces un paso atrás. Este es un aspecto en el que Japón podría contribuir. Al estar en Asia entre países en desarrollo, tiene una mejor comprensión. A veces Estados Unidos y Europa son demasiado apresurados en intervenir. En muchos países los gobiernos tienen solamente dos opciones. Una es que el ejército mate personas públicamente para mantener tranquila a la sociedad. La otra es que no hagan eso, pero a veces puede que maten a gente descontenta tras bambalinas. Y es horrible. Quiero que esa situación se detenga. Pero a veces hay solamente dos opciones. Tal vez se deba a la diversidad étnica excesiva y a las confrontaciones religiosas.

Predicar el establecimiento de derechos humanos y frenar las malas conductas de los gobiernos es ideal y correcto, pero no es una solución. A veces hay que priorizar, dejar que la sociedad sea más rica, darle a la gente más oportunidades, reducir el descontento. Después de eso se puede avanzar a la democratización, darle voz a la gente. Si se calcula mal la prioridad, de repente se tiene una situación democrática con gente discutiendo y gritando. Entonces intervienen los militares y construyen un gobierno más opresivo. No es una solución. Japón tardó en democratizarse en comparación con occidente y tuvo muchos fracasos, tuvimos un gobierno militar en la década de 1930 y la primera mitad de 1940. Por eso, comprendemos mejor la situación. Para encontrar una mejor solución tenemos que ser realistas, eso es lo que debemos explicarle a occidente a veces. Japón lo está haciendo y también está ayudando al desarrollo económico en muchos países. Esa es la idea básica de la diplomacia japonesa. Pienso que deberíamos seguir haciendo esto.

¿Cuál es la comprensión que tienen los japoneses comunes de esta diplomacia japonesa?

Los japoneses del común, una gran mayoría, son de pensamiento liberal y progresivo, así que su idea general es la de occidente, al igual que la de la gente en Europa o Estados Unidos. A veces se sienten irritados por la conducta lenta del gobierno japonés. Pero creo que la mayoría está satisfecha con la dinámica básica que he explicado y hay muchas experiencias que apoyan esta convicción.

Si se toma el ejemplo del TPP113, Estados Unidos era el líder antes de que Trump se retirara. Es un país a veces muy agradable e innovador, pero en ocasiones también es algo mandón, sermoneando y diciéndole a los otros miembros, “deben hacer esto” o “deben reformar esto”. Hay muchos países que dependen de Estados Unidos, pero muchos también sienten algo de desagrado hacia él. El gobierno japonés se unió a la negociación y lo que hizo al inicio fue no debatir contra Estados Unidos sino caminar por el lugar ayudando a los representantes de otros países a negociar con Estados Unidos, a hacer una lista de reclamos y presentarla. Fue de gran ayuda para los participantes que no estaban acostumbrados a las negociaciones económicas complicadas con Estados Unidos. Estaban muy agradecidos y se convirtieron en grandes fans de Japón. Después de eso, Japón empezó su lucha contra Estados Unidos e intentó minimizar las tarifas a la agricultura japonesa, y contó con el apoyo de países pequeños en la negociación. Estados Unidos se retiró abruptamente, pero Japón se convirtió en líder y concluyó el TPP11.

Japón tuvo varios ejemplos de éxito de este tipo de diplomacia de medio camino, como apaciguador entre occidente y el resto. Sin la actuación y contribución de Japón, el TPP11 podría haber colapsado y la idea occidental básica del tratado habría fallado. A veces parecen estar irritados con la conducta de Japón, pero a la larga entienden que está ayudando. Creo que esto es evaluado y apreciado por la mayoría de los japoneses. Así, seguimos en esta diplomacia de medio camino, complicada y difícil de entender.

Colombia está atravesando un proceso de construcción de memoria histórica. ¿Qué cree que podemos aprender de la experiencia japonesa?

Una razón por la que el Japón de Meiji sobrevivió es que terminaban las guerras rápido y con pocas bajas. Eso se debe a que las dos partes que se enfrentaban tenían el entendimiento mutuo de que debían unificar el país o no podrían hacer frente a la presión externa. Combatían, pero cuando era claro quién era el ganador y quién el perdedor, el líder perdedor se rendía rápidamente. Podía continuar, con una posibilidad mínima de luchar y ganar, pero no lo hacía. Me refiero al último shogun, Yoshinobu Tokugawa. Él tenía el ejército más grande de la época, pero perdió una batalla en el oeste de Japón, donde no tenía suficiente poder. Lo que hizo el gobierno fue contratar a muchos de los antiguos vasallos del shogun, se les dieron puestos en el gobierno a muchos del lado perdedor. Un sentido de igualdad, no perfecto, pero limitado, es indispensable para estabilizar la sociedad y la política después de la guerra civil.

Por otro lado, la bomba atómica es el peor recuerdo que toda la humanidad posee. Fue horrendo, pero fue un poder tecnológico abrumador que promovió el final de una guerra estúpida que Japón mismo no podía frenar y que de algún modo necesitábamos parar. Tener una memoria histórica correcta es muy importante. Así que, por supuesto, hay muchos recuerdos de la bomba atómica pero cuando recurrimos a la historia diplomática y política, condenamos el actuar de Estados Unidos de América y también el del gobierno y el ejército japonés mismo, e intentamos de algún modo hacer un balance.

Esto no es suficiente. Se necesita por supuesto un programa educativo basado en una comprensión correcta de la historia. Japón lo hizo considerablemente bien en lo que concierne a la autorreflexión de los militares, a veces hizo demasiado y ha resultado un poco contraproducente, ha habido malas reacciones por parte del lado conservador recientemente y ellos tienen sus razones. A Japón le fue muy bien y el factor primordial fue, por supuesto, el crecimiento económico.

Hay muchos malos recuerdos, pero si la gente se enriquece y puede tener mejor alimento para sí y para su familia, va a aceptar la situación incluso teniendo malos recuerdos. Pienso que lograr el crecimiento económico es el factor más importante. Entonces, cooperen con Estados Unidos y otros países y consideren unirse al TPP11. Creo que eso es lo que deberían hacer.

¿Hay algún dato de la historia japonesa que le gustaría que conocieran mejor los colombianos? ¿Por qué?

Me gustaría elegir a Shigeru Yoshida. Fue el primer ministro después del fin de la Guerra del Pacífico y estableció el régimen y los principios básicos del Japón posguerra que aún funcionan hoy: política y diplomacia enfocada en el crecimiento económico como prioridad.

Él era un gran diplomático y trabajó en China antes de la guerra. Como los diplomáticos promedio de esa época, era un imperialista e intentaba expandir la influencia y los intereses de Japón en el país vecino. Algo que debemos apreciar es que era muy arrogante y orgulloso, y pensaba que no necesitaba mucho apoyo del ejército japonés. Por eso, aunque desplegaba una diplomacia de línea dura, no era militarista. Intentó, en la medida de lo posible, no conducir una diplomacia de cañón. Además, también era realista. Sabía que una guerra con Estados Unidos era un suicidio y que la guerra total con China nunca daría fruto. Entonces, intentó frenar la guerra.

Después de la derrota, Yoshida entendió que Japón necesitaba cambiar completamente su rumbo y que la ayuda de Estados Unidos en materia de seguridad era lo más importante. Resistió fuertemente las solicitudes estadounidenses de rearme, diciendo “no necesitamos un ejército, hemos tenido suficiente de la guerra, los japoneses no tienen ánimo para eso”. Estados Unidos estaba atónito, “¿Seguro que no necesitan protegerse?”, se quería que Japón gastara dinero para rearmarse y apoyara sus esfuerzos en la Guerra Fría.

Como consecuencia, hubo estipulaciones desiguales y humillantes en el tratado de seguridad entre Estados Unidos y Japón. En el primer tratado no había una obligación clara de que Estados Unidos protegiera a Japón, pero Yoshida pensó que, como la armada estadounidense estaba en Japón, si hubiera algún ataque, intervendría. Sin embargo, eso no sentó nada bien con el pueblo japonés y en 1960 otro primer ministro modificó el tratado.

Yoshida aceptó el tratado desigual y se concentró en la recuperación y el crecimiento económico, fue bastante racional. Tenemos algunas quejas sobre eso, Japón es poco amable con sus compatriotas en el exterior, como ya dije. Entonces, regresando a mis recuerdos durante la Guerra del Golfo, tengo que culpar a Yoshida por hacer que el país sea así. Aún así, Japón es básicamente un país rico y feliz, y es gracias a él. En todos los países existen muchas tensiones internas y externas, pero, de algún modo, es necesario hacer concesiones, estabilizar la situación y concentrarse en el crecimiento económico, eso es lo primero que se debe hacer. Esa es la lección que aprendí de Shigeru Yoshida y me gustaría compartirla con ustedes.

Archivo AP News, Emperor Y oshida Visits Site Near Pearl Harbor [Fotografía Analoga], 1951.

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Notes

[1.] Liberal Democratic Party (Partido Liberal Democrático), el actual partido de gobierno.

[2.] Free and Open Indo-Pacific (Indo-Pacífico libre y abierto)

[3.] Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico